Durante los últimos días, el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI) concedió a la Universidad de Antofagasta una nueva patente de invención de la tecnología denominada: “Producto y procedimiento para la generación de material catódico utilizado en la generación de baterías de litio”, innovación desarrollada por el equipo del Centro de Investigación Avanzada del Litio y Minerales Industriales (CELIMIN) de la Facultad de Ingeniería, cuyo director es el Dr. Mario Grágeda, teiendo como investigadora e investigador principal a la Dra. Svetlana Ushak y el Dr. Aleksei Llusco.
Este nuevo proyecto está apoyado por la Oficina de Transferencia y Licenciamiento en la Universidad de Antofagasta (OTL-UA), el cual, está relacionado al desarrollo tecnológico de un material activo catódico para su uso en baterías de ion litio. En dicho proyecto se trabajó en el perfeccionamiento y creación de “polvos catódicos”, los cuales se convierten en una suspensión que se deposita sobre un colector de aluminio, para luego laminarse en cátodos y así transformarse en celdas de litio para luego dar lugar a una batería de litio.
Dicha innovación permitirá entregar energía eléctrica apiezas electrónicas portátiles, sistemas de almacenamiento de fuentes renovables, herramientas eléctricas, vehículos híbridos y eléctricos. Según, el Dr. Grágeda en esta nueva creación, el mayor prototipo manufacturado de la batería llega a un ampere/hora, “la gracia de este material catódico que hemos desarrollado, es que tiene una mayor capacidad, comparándolo con un producto comercial, llegando al 13% más de capacidad.”
El polvo catódico, además de usar carbonato de litio e hidróxido de litio mono hidratado entregado por la industria local, contiene Magnesio, un elemento fundamental para la realización de este material.Específicamente en esta zona minera de la Región de Antofagasta, podemos acercanos a este material en la bischofita, el cloruro de magnesio hexahidratado, que cubre algunos caminos de esta parte de Chile. Así lo explica Grágeda, ya que “se ha desarrollado un nuevo proceso para extraer desde la bischofita, el magnesio de alta pureza, para la realización de esta tecnología.”
Por otra parte, el Dr. Mario Grágeda se mostró muy contento por la obtención de esta patente, destacando que “los proyectos se han dado por el apoyo directo de la universidad; siempre digo que han creído en las ideas que hemos tenido en la Universidad de Antofagasta. Eso ha generado un clima motivador.”
Mientras tanto, la tecnología ya tiene solicitudes de patente en India, China, Corea del Sur, EE.UU., Japón y la Unión Europea, y sería la 15º Patente concedida de la Universidad de Antofagasta.